TRUCOS CASEROS PARA DEJAR TU ROPA BIEN BLANCA SIN TENER QUE USAR LEJÍA O CLORO.

Cuando tenemos ropa blanca, pretendemos que siempre sea blanca de modo que tan sólo la más mínima mancha se convierte en una catástrofe, porque es muy difícil de disimular.

Y aunque la prenda no esté manchada, con el tiempo, es normal que vaya tomando un color grisáceo o amarillento que le da aspecto de viejo y sucio.

¿Qué hacer para blanquear la ropa blanca? Veamos algunos “secretos de la abuela” que siempre podemos poner en práctica para blanquear la ropa y dejarla impecable, tal como nos gusta.

TRUCOS CASEROS PARA DEJAR TU ROPA BIEN BLANCA SIN TENER QUE USAR LEJÍA O CLORO.

1) Bicarbonato de sodio: Uno de los trucos más antiguos es el uso del bicarbonato de sodio para eliminar el tono grisáceo o amarillento que va tomando la ropa con el uso y con los consiguientes lavados.

¿Sabías que el bicarbonato de sodio muy eficaz para eliminar estas manchas amarillas? Una prenda blanca, una funda de almohada, un mantel… Todos poco a poco van tomando un color amarillento que el bicarbonato puede ayudarte a eliminar.

– Lava en el lavarropas la ropa en un ciclo completo con agua fría.

– Vuelve a lavar agregando una taza de bicarbonato de sodio al agua.

– Repite de ser necesario, en caso de que la ropa esté demasiado amarilla o gris.

Siempre es útil contar con el bicarbonato de sodio en casa, ya que podemos darle múltiples usos.

2) Jugo de limón: Si quieres utilizar un truco ciento por ciento natural para blanquear la ropa, debes tomar en cuenta el jugo de limón. Ya sea la fruta completa o el jugo son útiles en cualquier casa y sirven para gran cantidad de tareas domésticas.

En efecto, gracias al ácido que encontramos en los limones, son útiles para blanquear la ropa de manera natural. Podemos utilizar el jugo de limón o incluso rodajas de limón que podemos colocar dentro del lavarropas.

– Coloca una taza de jugo de limón en la lavadora.

– Enjuaga la ropa que desees blanquear con agua y jugo de limón únicamente.

– Seca al sol durante varias horas.

El limón es un excelente blanqueador de ropa y además es ecológico y natural.

3) Secar al sol: El sol es uno de los mejores aliados y un truco más que antiguo para blanquear y mantener nuestra ropa muy blanca. ¡Como nueva!

Así es, el sol también puede tener este efecto blanqueador sobre las prendas de vestir o sobre cualquier tela blanca. Luego de haber lavado la ropa, extiéndela al sol para que se seque y aplique su efecto blanqueador natural.

4) Percarbonato de sodio: ¿Escuchaste hablar del percarbonato de sodio? No confundir con el bicarbonato de sodio que tiene una apariencia similar. Este producto es muy poco conocido y es un agente blanqueador oxigenado ideal para devolverle la blancura a la ropa de manera eficaz.

Puedes conseguirlas en cualquier farmacia o por medio de algún vendedor en línea que haga entregas a domicilio. Puedes utilizarlo en cualquier momento para blanquear la ropa y telas blancas.

5) Agua de papas: ¿Qué te parece probar esta receta casera para blanquear la ropa a base de papas? Para intentar este truco casero, procede de la siguiente manera:

– Cocina una o dos papas.

– Corta un trozo de papa y frota la ropa con la papa aún caliente.

– Enjuaga la prenda con agua y termina de lavar en lavarropas.

El truco de las papas cocidas es excelente para blanquear la ropa y conservar el blanco brillante.

6) Agua oxigenada: Otro truco muy simple similar al percarbonato de sodio o el bicarbonato de sodio. El agua oxigenada posee también propiedades blanqueadoras con la condición de que sea oxigenada al 30%. Utilízala de la siguiente manera:

– Toma un recipiente en dónde quepa la ropa a blanquear y coloca agua caliente.

– Agrega aproximadamente 100 ml de agua oxigenada y mezcla.

– Sumerge la ropa durante 2 o 4 horas.

– Enjuaga la ropa para terminar con la limpieza.

7) Leche: La leche está en casi todas las casas, pero además de servir para el desayuno, la merienda o para preparar postres y comidas también puede ser útil para blanquear la ropa, ¡y de manera muy eficaz!

Cabe aclarar que aunque es muy efectiva para las prendas blancas percudidas y grisáceas, no es tan efectivo para las que han tomado un color amarillento.

Si tus prendas son de algodón, lino o seda blanca, aplica un poco de leche sobre las manchas y deja que se seque. Luego, lava de manera normal. Para un efecto aún más blanqueador, puedes dejar sumergida la ropa en un baño de leche durante una o dos horas aproximadamente.

Por último, extiende la ropa al aire libre y a pleno sol.

Este es un excelente truco para blanquear la ropa y devolverle el brillo rápidamente, en especial si se trata de prendas de algodón y lino.

8) Levadura química: Este truco es muy poco conocido pero sin embargo, funciona de maravillas. Vierte un sobre de levadura química en el compartimento del jabón del lavarropas al momento de lavado. Obtendrás una ropa más blanca y sin manchas amarillas.

También puedes utilizarlo en ropa con suciedad difícil como suelen ser manteles y cortinas.

9) Jabón de Marsella: Este jabón es tal vez un poco difícil de encontrar pero prácticamente sirve para todo. Si tienes la ocasión de conseguir jabón de Marsella no dejes de utilizarlo para blanquear la ropa.

El jabón de Marsella es ideal para eliminar la grasa y puede utilizarse en todo tipo de tela. Tanto a mano como en lavarropas, es un producto eficaz para blanquear de manera rápida.

Puedes seguir las indicaciones de utilización en lavadoras o frotar mientras lavas a mano con una mezcla de agua y jabón de Marsella directamente sobre la prenda a blanquear.

El jabón de Marsella puede obtenerse en pastilla, líquido o en copos.

10) ¡Evita las mezclas! En este caso no se trata de un truco para blanquear, sino más bien de una recomendación para que las prendas blancas duren más tiempo blancas.

Una vez que hemos constatado que las prendas de color no destiñen, solemos lavar todo tipo de colores en una misma tanda. ¡Error!

De una manera u otra todas las prendas de color despiden un poco de su tinta y esto es lo que va percudiendo la ropa de color blanco que poco a poco va dejando de ser blanca.

Las prendas deberían lavarse por colores o al menos, la ropa blanca que es la más delicada, debe lavarse por separado.